Muere un amor

Fragmentado, el cuerpo ya está desgastado

En los cuatro vientos, reposa la soledad

De un amor desboronado,

En el vientre de su pasión.

Muerde vilmente su envenenada suerte

Cayendo cuan parida flor

Transplantada crece en la roca

Sin alma del sol

Que mitigue el ardor en su boca.

Cede su prestando aliento

Desmayado aun se aferra los huesos

De un bendito sueño balbuceado en su alma.

Desnuda de corazón, sangra su sentimiento

Benévolo al dolor y su sufrimiento

Partido en dos.

Besa sus mejillas rosadas…, tiernas

Con un vaivén de inclemencia,

Marchitadas al roce de la presente ausencia

De su tierna y dulce presencia.

¡Hay, hay, retoño gemelo muere!

¡Muere tu niñez jovial abrasada al amor!

Fermentado dócilmente por el fuego

Ilusionado de cielo en la dulzura del infierno

Canta tu ultima plegaria, dale un ultimo beso

Al amor que muerto en vida

No puede seguir latiendo el suplicio de un ensueño.

Tras las puertas de suplicas inciertas

Cierra tu prisión tras tu carcelero

Apaga tu sol y cierra tu cielo, corta la flor

Que crece en el santuario de tus desvelos

Desahuciada al sufrimiento,

Termina tu obra teatral de la vida

En tu manantial secreto,

Con la muerte de un amor, grande y sincero

Nacido en un corazón si miedo y sin condición

Entregado ahora, en los brazos de la resignación.

Muere un amor,

Cubierto de ilusiones y sueños.